Corredor 4Teto. La música como experiencia.

Foto por: Sari Saw 

El pasado 14 de mayo, y luego de dos intentos, pude asistir a un concierto de Corredor 4Teto. Al final del concierto y mientras todos aplaudíamos, Andrés Corredor (director del cuarteto) tomó la palabra y agradeciendo a los que estábamos en el público nos invitó a apoyar a los artistas asistiendo a sus conciertos. Según él, la posibilidad de interacción con el público que le permite al artista un concierto enriquece la experiencia de uno y otro. Pasados algunos días de ese concierto me tomaré un momento para describir mi experiencia a usted que llega a este sitio. 

A finales de marzo de este año veía carteles pegados en los sitios que frecuento con la invitación al recital de grado de Andrés Corredor alternando con algunos músicos de su cuarteto. Para mí no pasaba de ser un estudiante más haciendo su recital; pero Dorian Romero, compañero en algunos proyectos musicales que desarrollé en el pasado asistió al recital y luego socializó conmigo sus conclusiones del concierto desde su interés como guitarrista eléctrico. Dorian me habló del recital y dijo que había escuchado una propuesta sólida, pertinente para la guitarra eléctrica y muy bien argumentada desde la música y la investigación. En Andrés Corredor, Dorian encontraba un referente claro de un guitarrista que aportaba elementos diferentes a la ejecución de las músicas colombianas desde el lenguaje que proporciona el instrumento.  Tal vez sin proponérselo (tal vez sí), Corredor había brindado una experiencia renovada en otro guitarrista y este a su vez la había replicado, dejando en mí la necesidad de escucharlo.

La tercera fue la vencida.

Ya había intentado verlo en el Festival de Blues y Jazz de la Libélula Dorada y en la celebración del día del Jazz. Pero fue solo hasta el 14 de mayo en la Sala de Concierto de la Biblioteca Luis Ángel Arango que pude ver la propuesta de Corredor 4Teto. Las notas del programa de mano aportaban algunos datos importantes para mi aproximación al concierto. Conceptos como “guitarra marimbe’a” (término que usa Andrés Corredor para referirse a la exploración tímbrica que ha desarrollado en la guitarra) y la descripción de repertorios que iban desde el funk, swing, el jazz; la cumbia, el porro o el pasillo, me dieron un marco referencial más amplio para sacar el mayor provecho al concierto.

Los aportes de Corredor 4Teto.

Luego de hora y media de concierto descubrí varios aportes importantes que describiré a continuación con más detalle.

Formato: el formato de Corredor 4Teto vincula al trío típico de jazz una percusión principalmente de las regiones costeras de Colombia. Cada intérprete da la sensación de ser un universo único que a su vez sirve al grupo, dijo al término del concierto una asistente  y no puedo más que apoyar su conclusión. Si uno recorre cada instrumento ve como la exploración no solo ha sido de Andrés Corredor, sino que cada uno desde su instrumento ayuda a la consolidación de un concepto único.

Concepto: Corredor 4Teto sigue una línea fácilmente diferenciable con los demás. Toma el jazz y a partir de este lenguaje vincula algunas músicas colombianas (anteriormente descritas). Visto así esto no es nada novedoso, la diferencia está en que cada recurso tímbrico, cada apropiación de elementos concretos ─como la ejecución de los bordones de la marimba de chonta o los pitos de la música pelayera en la guitarra─, es hecha con criterio y sin caer en saturaciones innecesarias. Hay una línea de trabajo clara.

Andrés Corredor como guitarrista: viendo a Andrés Corredor entendí muchas de las 

cosas que me decía Dorian la primera vez que lo vio. La ejecución de Andrés es magistral. La construcción de los elementos discursivos, la forma de ligar las frases, la acertada escogencia de los efectos y el desarrollo técnico son elementos únicos (solo por citar algunos) que aporta Andrés de manera significativa al desarrollo de la guitarra eléctrica en Colombia.

Repertorio: hay una intención de aportar obras originales que nutran el repertorio de las músicas colombianas y de la guitarra eléctrica. Temas como Sol de otro mundo, Oye vengo o Pícaro sureño tienen elementos como tratamientos modales o tímbricas híbridas entre el jazz y las músicas colombianas que convierte el repertorio en un aporte que refresca y brinda una mirada diferente al trabajo de composición desde las músicas colombianas.

En este momento Corredor 4Teto promociona su producción discográfica Reconocer que recoge mucho de lo que acabo de exponer. Pero si realmente quiere entender y sobretodo disfrutar de esta propuesta, le sugiero seguir el consejo de Andrés Corredor: asista a  los conciertos y vivan la experiencia que brinda el artista. 

Para escuchar más sobre Corredor 4Teto pueden ingresar al canal soundclud del grupo aquí.