Mi grupo, mi música: mi empresa (tercera entrega)

Foto: Portada perfil de Facebook 

Velo de Oza es una agrupación que, nacida del rock, incorpora elementos de la música carranguera para ofrecer una propuesta diferente a los dos géneros: carranga y rock. Con más nueve años de trabajo, Velo de Oza se ha convertido en un referente obligado al hablar de las músicas locales colombianas y su incursión en los nuevos formatos.

Esta es la última entrevista del ciclo "mi grupo, mi música: mi empresa", y fue realizada el 2 de marzo de 2015 vía Skype. En ella Frank Forero (voz y guitarra) y Lina Martínez (tiple) hablan sobre su experiencia inicial y la consolidación de la propuesta, su visión del mercado dentro de las músicas locales y su relación con los seguidores. 

Agradezco a las tres agrupaciones que hicieron parte del ciclo: Faoba, El Cuatro y Velo de Oza por su disposición para estas entrevistas. Los invito a leer, compartir y comentar las entrevistas del ciclo.




Entrevista a Velo de Oza.

John J. Osorio V. ¿Cómo ha sido el proceso de integrar la carranga al rock y cuáles han sido los desafíos de este trabajo?

Frank Forero (F.F.). Básicamente fue un proceso que se dio naturalmente, fue el mismo destino que fue uniendo los dos géneros. De alguna manera, desde el principio de Velo de Oza se pretendió ser una banda de rock más que de carranga. Nunca pensamos hacer un grupo que incluyera la carranga, fue algo que el mismo boyaquito que llevamos por dentro fue saliendo a flote en medio de riffs y groves rockeros. (Estos) fueron dando nacimiento a lo que es la carranga rock. Las dificultades, creo que se dan en respetar esa esencia de cada género, de cada estilo de vida que propone cada género, aunque tienen mucho en común. Ya más puntualmente podemos hablar que la carranga lleva mucho (compás) 3/4, cómo es el merengue carranguero; ya la rumba es un poco más fácil, un poco más cadenciosa.

Lina Martínez (L.M.). Respecto a un concepto muy técnico-musical: [Sic] las rítmicas. Es a lo que le decimos un compás compuesto, entonces pasar de un compás de 6/8 a uno de 4/4, eso sí lo veo más como un reto porque respetar los fraseos propios de la melodía en ese cambio de métrica lleva trabajo. Sin embargo, es en lo que se tiene mucho cuidado para lograr un producto de buena calidad.

J.J.O.V. Hay algo que llama poderosamente la atención y es cómo manejan los elementos de las guitarras y  la batería. ¿Esto es intuitivo o hacen un proceso más exhaustivo de esos lenguajes? Por ejemplo cuándo le meten distorsión a las guitarras…

F.F.  Yo creo que la misma emoción lo va llevando. La cuestión de la distorsión para mí es fuerza y es la misma emoción que lo va llevando a uno a darle espacio a cada género. Y más en lo nuevo de Velo de Oza que es volver a esa crudeza del rock dentro de nuestra música y la misma crudeza de la carranga. Creo que es más de momentos…

L.M… más intuitivo.

F.F. Sí, total. No es tan planeado, a pesar de que ya en un trabajo de producción sí se hace el proceso de decir: aquí puedo ir el requinto con la guitarra, y entonces hacer unos punteos a unísono. (Esto) puede explorarse ya dentro de un proceso de elaboración, como la preproducción, pero indudablemente la composición es totalmente intuitiva y creo que a pesar de todo, en el proceso de preproducción en lo nuevo de Velo de Oza, si va a ser más crudo. Va a tener un trabajo más básico pero más emocional.

J.J.O.V. Lina, tú estudiaste música en una universidad y tuviste un acercamiento a músicas populares. ¿Cómo integras ese conocimiento a tu grupo?

L.M. Sí, yo tengo una formación académica pero también resulta que por una tradición familiar yo ya había tenido contacto con ese género (carranga) desde hace muchos años. Para mí es un género que me resulta muy familiar. Para mí tocar ahí (en Velo de Oza) es más algo de pasión, más no del proceso analítico que uno hace cuando toca música académica o cuando toca en un grupo de cámara.

J.J.O.V. ¿Cómo arman el repertorio; llega una idea, llega otra o hay alguien que llega con un proceso de composición armado?

L. M. Pues generalmente es Frank el que lleva la idea principal. Él es el compositor de las canciones…

J.J.O.V. En el último álbum que lanzaron hace algunos años tienen cuatro temas de Jorge Veloza que adaptaron a su propuesta. ¿Cómo lo hicieron?

F.F. Las canciones deben pasar por un proceso de autorización y ahí si se le mete la ficha [Sic] para poderlas montar. Ya al nivel de las composiciones, (estas) llegan en un estado… puro, digamos, y se transforman totalmente cuando llegan a todo el grupo. En ocasiones está la idea un poco más concreta, a veces está muy cruda… está el esqueleto de las canciones: melodía y armonías y ya en los arreglos cada quien en su instrumento hace el aporte.

L.M. Lo que Frank dice es que él llega con la idea principal: armonía, melodía y forma del tema. Ya los arreglos instrumentales no son como lo que se maneja en música académica donde todo se hace en el arreglo escrito en Finale, acá se va haciendo sobre la propia música. Es un trabajo más experimental en realidad.

J.J.O.V. Me podrían dar tres referentes importantes para la música que hace Velo de Oza.

L.M. Obviamente Jorge Veloza.

F.F. Cada uno viene untado de diferentes influencias, eso hace que se manifieste en la forma de tocar y en lo que cada uno quiere proponer. La cuestión de las influencias es muy amplia porque todos tenemos gustos diferentes.  Estamos hablando de que hay integrantes que les encanta hacer dark. Por ejemplo a uno le gusta el dark metal, a mí me gusta mucho el punk-rock y el hard-core pero también me gusta mucho el Dub Step. A Lina le gusta mucho Justin Bieber (risas) y cosas así… suavecito.

L.M… Ah, sí, claro (risas). Yo si tengo influencias de músicas populares. Como tú sabes es a lo que me he dedicado… Me dediqué muchos años, pues.  Cada uno viene creciendo en un género diferente.

F.F. A nosotros en Europa, o en los mercados europeos, nos comparan mucho con Gogol Bordello, a pesar de que yo no encuentro en qué nos parecemos: no me suena. Pero sí es un referente que nos toca poner al frente cuando estamos hablando de negocios internacionales porque obviamente disfruta de más popularidad y además de eso indudablemente hay que citarlo para que tengan una idea de lo que hacemos.

L.M. Sabes cuál otro… este de Mumford (and Sons)

F.F. No es un referente de nuestra música o composición, sino a la hora de decirle a la gente: es que nosotros hacemos música carranga con rock. Ellos dicen. ¿Qué es carranga con rock? Nosotros les decimos: más o menos así. Y ahí sí nos entienden. Porque de todas formas si hay una escuela influenciada por el rock sureño.

J.J.O.V.  ¿Cuándo ustedes empezaron Velo de Oza en algún momento pensaron en llevar su música a un segmento de público determinado?

F.F. No…

J.J.O.V. ¿Ustedes empezaron a hacer la música y la gente empezó a llegar?

F.F. Cuando uno empieza un proyecto musical uno no piensa en mercados, uno no piensa en empresa como tal. La empresa se va formando dentro  del proyecto musical. Yo creo que hay ese algo que después uno identifica y uno dice: “ah, nuestro target es esta gente”,  pero de primerazo creo que no.

J.J.O.V. En este momento cuál es el segmento de mercado.

F.F. El target de la banda son jóvenes de 20 a 30 años, hombres y mujeres, que les gusta el rock y la nueva música. A nivel de estratos (socioeconómicos) de 3 a 5, es lo que hemos visto a nivel de redes sociales y es lo que se mueven. En la música más popular, (los oyentes) están muy arraigados a lo que suena en radio: no están abiertos a nuevos sonidos; mientras que la gente de estratos más altos sí son más independientes a la hora de escuchar música y no le creen tanto a la radio sino que buscan de alguna manera nuevas alternativas de escuchar nuevas músicas…

L.M. Mente abierta a nuevas propuestas, a nuevos sonidos.

J.J.O.V. ¿Cómo establecen canales de comunicación con este público?

Los dos. Redes sociales.

F.F. Actualmente Twitter, Facebook y Youtube. Son las únicas redes sociales que manejamos. Está soundcloud…

L.M. ...Fotos por Instagram y fragmentos de videos.

J.J.O.V. ¿Cómo ha sido la relación con los círculos tradicionales?

F.F. Buena. Creo que tanto en el rock como en la carranga la música ha sido bien recibida y dentro del gremio hay mucho respeto. He notado una buena acogida.

L.M. Como la canción “La ruana”, que la quieren montar otros grupos.

F.F. Por ejemplo, El Tocayo Vargas, que es uno de los iconos de la música carranguera. Incluso músicos de nueva música como Rumbambuqueado también nos han dicho que quieren montar la canción “La ruana”. Eso es bonito. Llegar a un festival como el Guane de Oro ─cuando alguna vez fuimos─, y ver que la gente quería fotos, hablar con la banda. Uno nota que si hay una muy buena acogida. En el rock igual, obviamente en los (rockeros) radicales nada qué ver porque este es un grupo alejado de los radicalismos, por eso mismo no gozamos de la aceptación de los que les gusta el rock tradicional, sesentero, setentero, ochentero… pero el resto de personas que están buscando nuevos sonidos la aceptación es muy buena.    

J.J.O.V.  Ustedes tienen una escena muy particular. ¿Cómo se piensan esa escena? ¿Hay algún libreto o es más intuitivo?

L.M. No, esa sí es un poquito más planeada. Ahí Frank es el de las ideas. Él propone [ej.]: muchachos, hagamos tal cosa o que en cierto punto de la canción se vea así… Sí, siempre se le ocurren ideas chéveres…

 F.F… Pero el grupo también las va nutriendo.

L.M. Sí, también cada uno va (diciendo): oiga, hagamos está cosa. Hagamos un saltico… ¡ay, sí, queda chévere! Va saliendo, pero eso (la escena) es algo más planeado porque hay cosas que sí toca ensayar. Tocar y cantar, sale; pero tocar y bailar no. Toca llegar a la casa a ensayar.

J.J.O.V. ¿Cómo se financian?

F.F. Con conciertos. La fuente de ingresos de la banda son los conciertos. Hasta el sol de hoy es la única fuente de ingresos. Conciertos directamente.

J.J.O.V. ¿Cuántos conciertos en promedio hicieron el último semestre?

F.F… Por ahí unos diez.

J.J.O.V. ¿Todos pagos?

F.F. Sí.

L.M. (Ella le pregunta a Frank). ¿Ese semestre hicimos promocionales?

F.F. Últimamente no hemos hecho (conciertos promocionales) porque no hay material promocional. Cuando hemos estado gratis es para RCN, Caracol, para cosas que generan mucha noticia, y lo uno de alguna manera compensa lo otro. Usualmente no tocamos gratis, ¡uno feliz tocando gratis!, pero como cada quien tiene trabajo entonces no se puede tocar gratis porque piden permisos y a la hora de un toque pago, pedir otra vez permiso… Preferimos evitar eso por ahora.

J.J.O.V. ¿Han logrado algún tipo de alianzas?

F.F. Son pocos los videos en donde hemos invertido dinero de forma directa. En esos videos hemos invertido pero no mucho. Teniendo en cuenta que un video es costoso, creo que hemos salido muy bien librados en ese sentido. En el disco estuvimos con un sello que fue MTM, que yo considero una alianza porque hubo plata de la banda y (plata) por parte del sello.

Alguna vez nos patrocinó una empresa de tatuajes. La única que se benefició fue Lina, pero nos patrocinaron. Y las ruanas son patrocinadas por los artesanos de Villa de Leyva que van hasta ahora porque viene un nuevo disco y vienen nuevas ruanas y no sabemos si todavía nos van a seguir apoyando o pasamos nosotros a comprarlas.

J.J.O.V. ¿Cómo ven el mercado nacional?

F.F. Son dos puntos de vista diferentes, porque Lina se mueve en una parte más académica, un poco más folclórica ¿puede decirse? Desde mi punto de vista el mercado nacional es un mercado creciente, que está generando credibilidad en los inversionistas y disminución del factor de riesgo en la incursión de nuevos oferentes. Creo también, que es muy fácil destacarse en un mercado nacional porque hay muchos sonidos similares, entonces todos le están haciendo la misma apuesta a la música  afrocolombiana, principalmente. 

Velo de Oza fue un factor diferenciador porque en medio de todo es algo sencillo. No fue fácil llegar ahí pero en últimas no tiene mayor ciencia. El factor diferenciador es clave en un mercado y veo que en Colombia es muy fácil diferenciarse. Una propuesta para salirse (destacarse) no es sino no querer hacer lo que hizo otro grupo y listo, sale un sonido nuevo; porque del cien por ciento de agrupaciones un 99% se está luchando volver a ser AC/DC… ¡Quieren sonar a lo mismo!

Creo que hay mucha oportunidad. En términos administrativos hay unas barreras de ingreso muy bajas. Hay mucho oferente, mucha  gente queriendo hacer música entonces se rasgan las ropas queriendo subir sin darse cuenta que otros están subiendo más suave, pero sencillamente porque hay un factor diferenciador. Sin embargo, es un mercado difícil porque no tiene de alguna manera los creyentes suficientes a nivel de público y de inversionistas.

L.M. Este es un momento donde se está explotando mucho con fusiones de músicas tradicionales. Eso me parece muy bueno. Velo (de Oza) tiene una ventaja por lo que decía Frank: es un factor diferenciador, eso lo hace único; sin embargo dentro del país, para mí, no hay mucho para dónde coger. Yo veo la cosa más afuera. Acá hace falta entes para mover más todas las propuestas que salen todos los días.     

J.J.O.V. ¿Ustedes creen que si tocan mucho afuera y vienen son vistos diferente?

F.F. Total

L.M. Yo creo que sí.

F.F. Nosotros aquí comemos mucho cuento de que si le ponen "chulito" (visto bueno) a un proyecto colombiano en el exterior, es excelente. Aquí no pueden dar ese "chulito", es más difícil. Aquí el "chulito" lo da la radio.




En este momento Velo de Oza viene promocionando su trabajo discográfico Sumercé, que pueden escuchar en Spotify. Para conocer más de Velo de Oza pueden ingresar a:
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